En un giro inesperado de la diplomacia internacional, Ucrania (Zelenski) y Estados Unidos (Trump) firmaron un histórico acuerdo sobre minerales que podría redibujar no solo la economía del país europeo, sino también las dinámicas geopolíticas de la región.
Esta alianza estratégica entre Trump y Ucrania ha generado intensos debates debido a las concesiones obtenidas por Kiev y los beneficios económicos que recaen en Washington.

Ucrania logra evitar pagos por ayuda pasada y retiene control sobre sus recursos
Después de semanas de tensas negociaciones, Ucrania logró imponer condiciones más favorables al firmar el esperado tratado. A diferencia de versiones anteriores, el documento final no obliga a Kiev a devolver la ayuda militar ya recibida por parte de EE.UU. Además, el país mantendrá la propiedad del subsuelo y la potestad para decidir qué recursos se extraen y en qué zonas.
De la confrontación a la cooperación: un acuerdo con concesiones mutuas
El presidente Trump, quien inicialmente exigía una participación del 500 mil millones de dólares en minerales ucranianos como compensación por el apoyo militar brindado, tuvo que retroceder.
Aunque mantuvo ventajas significativas para EE.UU., como derechos preferenciales en la explotación, accedió a eliminar ese punto polémico del acuerdo.
Las tensiones llegaron al punto máximo en una acalorada reunión en febrero, cuando el mandatario estadounidense se negó a otorgar garantías de seguridad, provocando un impasse con el presidente Zelensky. Finalmente, Kiev retiró esta exigencia para poder avanzar con el pacto.
Un fondo conjunto de inversión para reconstrucción y extracción
El documento establece que la futura asistencia militar estadounidense será considerada como una inversión dentro de un fondo común para la reconstrucción de Ucrania. Parte de estos fondos serán destinados al desarrollo del sector de recursos naturales en Ucrania, donde EE.UU. tendrá un rol destacado pero no exclusivo.
Lenguaje político firme contra Rusia y guiños a la Unión Europea
Otro aspecto destacado del acuerdo es su firme condena a Rusia como país agresor, algo que contrasta con anteriores declaraciones de Trump, quien había relativizado la responsabilidad del Kremlin.
Además, el texto deja abierta la posibilidad de que Ucrania se adhiera a la Unión Europea, comprometiéndose a revisar el acuerdo si esa membresía llega a concretarse.
Beneficios para Estados Unidos: exenciones fiscales y peso legal del acuerdo
El tratado también ofrece a las empresas estadounidenses condiciones favorables, como la exención de impuestos y aranceles en Ucrania. Además, si surge un conflicto entre este acuerdo y la legislación ucraniana, el tratado tendrá prioridad legal.
Este acuerdo entre Trump y Ucrania por minerales estratégicos representa un hito geoeconómico que redefine las relaciones entre ambos países. Aunque Kiev no obtuvo todas sus demandas, especialmente en materia de seguridad, logró consolidar una alianza económica con EE.UU. que fortalece su posición frente a Rusia y su aspiración europea.